miércoles, 5 de marzo de 2008

Colegas

Sueño en dos partes, aparentemente inconexas:

1

Sube un amigo (que tiene una extensa colección de guitarras) a casa a echarme una mano con una ventana de aluminio que da a la galería. Él, que es más manitas, se sube a la ventana y yo le ayudo desde el suelo. Cuando hemos conseguido sacar la ventana, el colega se lanza al vacío para agarrarse a una barra que hay un poco más abajo y hacer una pirueta. Qué cachondo. Pero no calcula bien el salto y se mete un talegazo (son tres pisos) muy considerable.

- ¿Estás bien?
- Bueno...más o menos.

Cuando sube cojea de una pierna. Me sorprende un poco que no se haya abierto la cabeza.

- Cojeas un poco. ¿Seguro que estás bien?
- Sí tío. Por cierto el vecino del bajos se vende una réplica de serie L por 750€. Por si te interesa.

2

Estoy en el patio de la escuela en la que estudié EGB de pequeño. Hay muy poca gente. Veo una pelota de baloncesto gris que parece que no es de nadie y decido cogerla y echar unas canastas a mi rollo. Al cabo de un rato uno de los del curso superior me pide la pelota alegando ser suya. Se la doy aunque no estoy muy seguro si es realmente suya o no. Como no tengo mucho que hacer decido irme pero en ese momento reconozco a un amigo de clase (omito nombre) que está haciendo un rondo con tres o cuatro chicas. Todos van desnudos.

Al saludarlo se aparta del rondo y empezamos a hablar y contarnos como nos ha ido en estos años. Se nos une a la charla otro amigo (vuelvo a omitir nombre) muy risueño que no sé muy bien de dónde sale.

El amigo que hacía el rondo dice que todo va bien, a pesar de no haber acabado aún la carrera (fuimos a la misma universidad) y de haber tenido un hijo con una mujer casada en un desliz de una noche. Por suerte, según comenta, su novia no sabe nada.

- Menos mal que te va bien- pienso para mi mismo.